Turismo Sostenible

¿Ser o parecer? La transparencia como compromiso ineludible

Por Estefanía del Azar (Las opiniones expresadas son propias)

El ser humano está acostumbrado a cubrirse, ya sea con ropa, maquillaje, titulaciones… nos cuesta desentendernos de las capas más superficiales para mostrar sin coraza quienes somos abiertamente. Nos anclamos en ese espacio seguro pero incierto, donde se nota que la transparencia muchas veces brilla por su ausencia. Tanto es así que hasta las empresas empiezan a ‘maquillar’ sus comunicados, haciéndonos entender cosas que no son, cayendo en el greenwahsing de turno – no entiendo aquí la finalidad – ¿Quién quisiera parecer, antes que realmente ser? 

La verdadera valentía en este mundo de filtros en el que vivimos, es la de ser uno mismo – ¡qué manía hay con decorar(nos) con florituras, marcas y llenarnos la boca de ‘yo, yo y yo…’ y alimentar así el ego desmedido que no nos deja ser verdaderamente libres. 

Las marcas (de cualquier tipo), las que realmente triunfan, son las auténticas, las que conectan con su público de forma genuina – o así debería ser, porque todos sabemos que el dinero puede llegar a conseguir notoriedad y hueco en el mercado. En la vida te pueden engañar una vez – entiéndase por engañar venderte algo que no cumple con tu expectativa – pero el consumidor podrá caer una vez, dos ya no creo (a no ser que no haya quitado la autorrenovación, estrategia vil donde las haya…) 

¿Pero cómo puede conectar de verdad esa marca con ese consumidor potencial y hacer ‘match’? Lo primero con productos/servicios de calidad, y quiero recalcar aquí que la calidad también implica el que tenga unas garantías, que esté fabricado de una manera honesta y ya de paso sostenible, que comunique de manera clara sus intenciones, lo que ofrece, de una manera genuina, con un vocabulario sencillo, que tenga una buena experiencia de compra (en todos los canales y espacios) – y la lista a Santa Claus podría seguir, pero con eso me conformaría. 

Es fácil que las empresas y los humanos que la componen pierdan el foco de a dónde quieren llegar con lo que hacen. Por eso, los objetivos son vitales, así como diseñar una buena estrategia para llegar a ellos. Y definir qué se considera éxito. Os preguntareis ¿pero por qué tantas marcas/productos fallan al encontrar su ‘match’? ¿Por qué esos consumidores hacen ‘swipe’ hacía el lado que no deben? ¿Falla el producto/servicio? ¿Falla la comunicación? ¿Ambas? ¿Les falta notoriedad? ¿Serán demasiados compitiendo por ese trozo tan pequeño del pastel? No tener miedo a explorar, a investigar el porqué de la situación te llevará a ver qué falla y cómo puedes mejorar. La transparencia no debe darse solo hacia el consumidor, sino también de manera interna entre todos los departamentos/empleados. El no tener miedo a recibir quejas, a escuchar y sobre todo el no tener miedo a cambiar para mejorar. 

Es curioso que en el arte, la transparencia es de las cosas más complicadas de pintar. No sé cuánto tardó Vermeer en pintar esa famosa copa de vino, lo que estoy casi segura es que debió de pintarla una y otra vez, boceto tras boceto, hasta dar con la final. En el arte, como en la comunicación, no hay fórmula mágica – aunque hay una cosa que no se acepta ni tolera en ninguna de las dos disciplinas y es el engaño. La originalidad es lo que se premia, donde la verdad tiene que alzarse como bandera – al estilo Delacroix, en ‘La libertad guiando al pueblo’

No tengamos miedo a comunicar(nos) desde el corazón. Sólo cuando lo hacemos con autenticidad y propósito logramos conectar de verdad. Y cuando eso pasa… ¡Ahí radica la verdadera fuerza de la comunicación! Esa conexión es la más anhelada, pero no se consigue sin transparencia. 

Estefanía del Azar

Profesional de la Comunicación en Turismo

Para Regenera ONG

@delazar – Twitter e Instagram | https://www.linkedin.com/in/delazar/

Desde Regenera ONG, trabajamos para fortalecer la sostenibilidad en el turismo a través de la educación, la regeneración de ecosistemas y el impulso de proyectos que priorizan el bienestar de las comunidades locales.

La transparencia es una práctica cotidiana, no es solo un compromiso ni una estrategia para la sostenibilidad; va más allá. Es la base para lograr una conexión genuina con las personas, especialmente con quienes habitan territorios frágiles y/o amenazados, donde las promesas incumplidas han dejado huella. Por ello, nuestro discurso debe estar en total coherencia con nuestras acciones. La transparencia es una práctica cotidiana que implica escuchar, aprender y transformar junto a las comunidades. Solo desde la autenticidad y la responsabilidad podemos generar confianza y contribuir a un turismo que realmente apunte hacia la regeneración.

Creemos que solo desde la autenticidad y la responsabilidad podemos generar confianza y contribuir a un turismo que realmente apunte hacia la regeneración. Al comprometernos con este camino, nos convertimos en agentes de cambio, promoviendo un modelo turístico que respeta, repara y potencia el valor de cada destino y de las personas que lo hacen único.

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